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Es verdad que el primer mes de vida de tu hijo es duro, pero si algo he aprendido es a tener PACIENCIA. Yo por lo general siempre he pecado de tener poca, así que jamás pensé que con Pol podría llegar a tener tanta. Pero supongo que es algo innato al final, cuando ves que una personita depende completamente de ti, florece de tu interior lo que nunca habrías imaginado. En mi caso fue la paciencia, que es de lo que carecía. Gracias a esto he sobrellevado bastante bien los primeros meses, si tu bebe te ve tranquila, calmada y con la situación controlada, lo percibe, te lo aseguro!!
Os contaré un ejemplo que me asombró, y no para bien precisamente…Ayer quedé con mis amigas en un bar, y en la mesa de al lado había un matrimonio con un bebe de 2 meses como mucho. Éste había comido bien, hecho su eructo de bebé que tanto nos gusta y aplaudimos, y ya solo faltaba que se durmiera. Pero como también le pasa a mi hijo, a veces no se saben dormir solos y se quejan un poco. Solo hace falta saber leer a tu hijo y saber lo que necesita de ti, el instinto maternal del que ya hemos hablado, que para mí en muchas ocasiones se asemeja al SENTIDO COMÚN.
Pues bien, la madre coge al pequeño y estando nerviosa por los lloros le pega cada meneo para dormirle que lo único que consigue es ponerle aún más nervioso y que los lloros aumenten de tono.
Por lo que si no os funciona este método, a mí lo que me funciona en estos casos es cogerlo con cariño, estando tranquila, le toco la cabeza y le voy cerrando los ojos mientras le tarareo una canción, da igual cual, mientras se relaje. Incluso si ves que sentada no acaba de funcionar, te pones en pie y haces como si lo balancearas muy suavemente.
Otra cosa que le gusta a Pol es que le ponga el doudou en la cabeza haciéndole un poco de presión y tapándole los ojitos. Parece mentira pero les recuerda a cuando estaban dentro del útero materno y les calma, se sienten seguros y se acaban durmiendo.
Estos son dos ejemplos de doudous que tengo para Pol:
